Delincuencia en Chile obliga a empresas a cerrar: voces ciudadanas exigen medidas urgentes
La creciente ola de delincuencia en Chile está dejando un rastro de preocupación e incertidumbre en distintos sectores del país. La inseguridad no solo afecta a los ciudadanos, sino también a empresas que han decidido cerrar sus puertas debido a los constantes robos y actos de violencia. Tal es el caso de la cadena de tiendas OXXO, que recientemente anunció el cierre de varias sucursales en regiones como Santiago y Valparaíso.
El impacto de esta situación es palpable. Conversamos con dos entrevistados, quienes comparten sus visiones sobre la crisis que atraviesa el país.
"Vivimos con miedo", asegura María López, comerciante de Santiago.
"En mi negocio he sufrido tres robos este año. Antes podía cerrar tranquila al final del día, pero ahora siento que no hay garantías. He pensado en cerrar definitivamente, porque las pérdidas son inmensas. Ver a grandes cadenas como OXXO retirarse solo confirma que la delincuencia nos está ganando", comentó María, visiblemente afectada.
Por su parte, Carlos Martínez, analista en seguridad pública, sostiene que el problema no es solo policial.
"Esta crisis es el reflejo de un deterioro estructural en las políticas de seguridad y la falta de cohesión social. Si bien se han implementado medidas como patrullajes y cámaras de vigilancia, el alcance es insuficiente. Es urgente que el Gobierno aborde las causas de raíz: desigualdad, desempleo y el tráfico de drogas, que está detrás de buena parte de la violencia", explicó Martínez.
La salida de empresas como OXXO deja en evidencia la falta de garantías tanto para emprendedores como para grandes corporaciones. Según datos recientes, los delitos de mayor connotación social han aumentado en un 25% en comparación con el año pasado.
El llamado de la ciudadanía y los expertos es unánime: se requiere una estrategia integral y efectiva para frenar la delincuencia antes de que más empresas cierren y más familias vean comprometida su seguridad.
Mientras tanto, barrios enteros continúan enfrentando la incertidumbre de un país donde el temor parece haberse convertido en la norma.