Gobierno de Chile Anuncia Aumento del 23% en la Cuenta de la Luz y Nuevos Impuestos a Aplicaciones y Compras Internacionales

Otro duro golpe a las familias que más necesitan 

Santiago, Chile – En un anuncio que ha generado preocupación en millones de familias chilenas, el Gobierno de Chile informó un incremento del 23% en las tarifas eléctricas, un golpe duro para los hogares que ya enfrentan dificultades económicas. Este aumento, que entrará en vigencia a partir del próximo mes, afectará directamente a los sectores más vulnerables del país, quienes ven cómo el costo de la vida sigue escalando sin tregua.

El aumento en la electricidad no llega solo. El gobierno también informó la implementación de un nuevo impuesto al valor agregado (IVA) que afectará tanto a las aplicaciones de uso diario como a las compras internacionales. Plataformas digitales de transporte, comida, entretenimiento y otros servicios pasarán a tener un costo adicional, lo que impactará directamente el bolsillo de los usuarios.

Las compras internacionales, que hasta ahora habían sido una alternativa más accesible para acceder a productos de mejor calidad o más económicos, también serán gravadas. Esto genera una barrera adicional para las personas con menos recursos, quienes podrían ver limitada su capacidad de adquirir productos o servicios que antes estaban a su alcance. La medida, según el gobierno, busca igualar las reglas del juego entre las compras locales e internacionales, pero ha sido criticada por afectar desproporcionadamente a los sectores más vulnerables.

Organizaciones sociales y expertos económicos han manifestado su preocupación, advirtiendo que estas políticas podrían generar aún más presión sobre las familias de menores ingresos, que ya enfrentan serias dificultades para llegar a fin de mes. Las medidas, sumadas a un contexto económico complicado, dejan a muchas personas sin alternativas viables, consolidando una brecha entre quienes pueden absorber estos costos y quienes se ven directamente perjudicados.

El debate está sobre la mesa, y se espera que en las próximas semanas se escuchen más voces que, desde diversos sectores, busquen revertir o al menos mitigar los efectos de estas decisiones sobre la población más vulnerable.